Volumen 12, Número 2, Abril-Junio, 2024,
Páginas 77 al 87 |
|
Associated dyslipidemia in patients with arterial hypertension treated
at the Ambato Tamborapa-Bellavista health center, 2023
Lucy Zurita[1]*
y Yudelly Torrejón1
El objetivo fue establecer la
relación de la dislipidemia con la hipertensión arterial en pacientes atendidos
en el Centro de Salud Ambato Tamborapa – Bellavista,
2023. Se empleó una metodología de enfoque cuantitativo, tipo básico,
descriptivo, prospectivo y correlacional con un diseño no experimental. La
muestra lo conformaron 100 pacientes, para el análisis de datos se empleó el
software estadístico SPSS versión 27, se aplicó la prueba de correlación Rho de
Spearman. Los resultados indican que el 57% tienen presión sistólica leve, el
32% moderado y el 11% severo. Mientras que, en presión diastólica el 52% tiene
nivel leve, el 44% moderado y el 4% severo. En colesterol, el 61% presentan
nivel alto y el 39% muy alto, el HDL el 46% tienen niveles altos y el 54% muy
altos, en LDL el 90% tienen niveles altos y 10% muy altos, los triglicéridos el
79% presentan niveles altos y 21% tienen muy altos. El colesterol,
triglicéridos y la hipertensión arterial obtuvieron relación positiva y
directa, teniendo el colesterol (r=0,165), triglicéridos (r=0,110), en el HDL y
LDL con la hipertensión arterial presentaron un valor de significancia p ≤
0,05.
Palabras
clave: Dislipidemia, factor de riesgo,
hipertensión arterial.
The objective of this study was to establish the relationship between
dyslipidemia and high blood pressure in patients treated at the Ambato Tamborapa Health Center - Bellavista, 2023. The methodology
employed was a quantitative approach of basic, descriptive, prospective and
correlational type was used with a non-experimental design. The sample
consisted of 100 patients. Data analysis was conducted using the statistical
software SPSS version 27 and Spearman's Rho correlation test was applied. The
results indicate that 57% have mild systolic pressure, 32% moderate and 11%
severe. While, in Diastolic Pressure 52% have a mild level, 44% have a moderate
level and 4% have a severe level. In cholesterol, 61% have high levels and 39%
have very high levels, HDL 46% have high levels and 54% have very high levels,
LDL 90% have high levels and 10% have very high levels, triglycerides 79% have
high levels and 21% have very high levels. Cholesterol, triglycerides and
arterial hypertension obtained a positive and direct relationship, with
cholesterol (r=0.165) for triglycerides (r=0.110) in HDL and LDL with arterial
hypertension presenting a significance value p ≤ 0.05.
Keywords: Dyslipidemia, risk factor, arterial hypertension
* Autor para
correspondencia
La
dislipidemia es una serie de trastornos metabólicos asintomáticos que
constituyen una preocupación mundial
para la Salud Pública. Estas enfermedades se caracterizan por alteraciones en niveles sanguíneos de
lipoproteínas que conllevan un alto riesgo para la Salud (Candas
et al. 2019). Las dislipidemias se asocian con la aparición y presencia de
estas enfermedades crónicas, lo que
afecta significativamente la calidad de vida y la esperanza de vida de los pacientes
afectados (Pavía
et al., 2022). Esta investigación se enfoca en identificar y analizar las dislipidemias,
con el fin de obtener una comprensión más profunda de cómo afecta a la
Salud Pública.
La hipertensión arterial es considerada una de las enfermedades crónicas
no infecciosas. Por lo tanto, cabe mencionar que la hipertensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre sobre las
paredes arteriales(Corella y Ordovás, 2017). Según investigaciones las enfermedades cardiovasculares y la hipertensión pueden estar relacionadas con la dislipidemia (Armijos et al. 2021).
Núñez
(2017), en su investigación determinó la relación entre la dislipidemia y el
control de la hipertensión arterial en pacientes atendidos en la unidad de
Salud de Baracoa en Puerto Cortés – Honduras. La muestra estuvo conformada por
150 pacientes, el 60% tenían hipertensión alta, mientras que el 40% tenían
hipertensión controlada. Los resultados del estudio mostraron una asociación
significativa entre los niveles altos de LDL, con un valor de p < 0.039.
Además, se encontró una asociación significativa entre la hipertensión y los
niveles de HDL, con un valor de p = 0.032. Cabe mencionar que los resultados
también indicaron que la hipertensión arterial no estuvo significativamente
asociada con los niveles altos de triglicéridos (p = 0.156) ni con el
colesterol (p = 0.318), ya que estos valores de p son mayores de 0.05, lo que
indica que no hay diferencias significativas en estos casos.
Asimismo,
León et al. (2020), en su investigación su objetivo fue determinar la prevalencia de dislipidemia,
obesidad e hipertensión en un grupo de administradores universitarios de la región de Ecuador Utilizaron el software
estadístico SPSS. Sus
resultados mostraron que el 36,66% presentaba hipercolesterolemia, y el 41,66% presentaba hipertrigliceridemia.
Además, el 55% de los pacientes tenía HDL altos, y el 18,33%
LDL altos. La dislipidemia mixta afecta entre el 20% y el 10% de la población, el 18% tuvo hipertensión alta. Sin embargo, la dislipidemia, excepto
el LDL alto, no mostró una relación
significativa con la hipertensión.
Además, Quishpe y Champutiz
(2022), determinaron la incidencia y
factores relacionados con las dislipidemias en
el Hospital Básico Cayambe.
La muestra lo conformaron 1415 pacientes. Los resultados mostraron que la
prevalencia global de dislipidemia
fue de 79,8%. El 46,5% de los pacientes con triglicéridos resultaron ser la dislipidemia más común,
seguida del colesterol con el 36%, LDL 29,6% y
HDL con 24,2%, la hipertensión arterial el 23,9%. Además, observaron
relaciones significativas entre
hipercolesterolemia e hipertensión arterial (p: 0,001), el HDL (p: 0,000).
Los datos se analizaron mediante la prueba de Chi
cuadrado, p<0,05.
Castro
(2021), determinó la relación entre la dislipidemia e hipertensión arterial
como factor de riesgo en el Hospital General de Jaén. La muestra lo conformaron
137 pacientes. Los resultados mostraron
que el 56,20% presentaban hipertensión
leve; el 22,62% tenía hipertensión moderado; y el 21,16% tenían
hipertensión severa. Asimismo, 79,56% de los pacientes presentó
dislipidemia; 67,8% tenían hipercolesterolemia;
y el 48,4% tenía enfermedad cardiovascular. Considerando la razón de prevalencia del 56,20% y el valor de Chi2 de 4,17 que es superior
al punto crítico de 3,84 (tabulado) los resultados muestran
que la dislipidemia se asocia significativamente con la hipertensión arterial.
Por
lo tanto, esta investigación generó un aporte teórico al investigar sobre la
dislipidemia como factor de riesgo de la hipertensión arterial, lo que
significa una fuente importante de información para futuras investigaciones en
el tema de estudio. Aporta al nivel práctico y social al constituirse como guía
en el planteamiento de estrategias para reducir casos de dislipidemia en
pacientes con hipertensión arterial. Además, cumple con ser un referente para
ser aplicado en las intervenciones dentro del campo de la Salud
Del
mismo modo se planteó el objetivo general dirigido a establecer la relación de
la dislipidemia con la hipertensión
arterial en pacientes atendidos en el Centro de Salud Ambato Tamborapa – Bellavista, 2023. Por lo que los objetivos específicos se enfocaron en: Identificar
el nivel más frecuente de la hipertensión arterial en pacientes atendidos en el Centro de Salud Ambato Tamborapa
– Bellavista, 2023 y determinar la prevalencia de dislipidemia en pacientes con hipertensión arterial atendidos en
el Centro de Salud Ambato Tamborapa –
Bellavista, 2023.
La
técnica de recolección de información fue el análisis documental, mediante la
revisión de historias clínicas para recolectar datos
sobre dislipidemia e hipertensión arterial en los pacientes atendidos en el
Centro de Salud antes mencionado.
Se
utilizó una ficha de recolección de datos, validada previamente por un panel de
expertos. La recopilación de datos se llevó a cabo de la siguiente manera:
·
Se
solicitó y obtuvo permiso del jefe del establecimiento del Centro de Salud
Ambato Tamborapa para acceder a las historias
clínicas necesarias (Ferrari Penadillo, 2023).
Para
el procesamiento de los datos recolectados, se utilizó el software estadístico
SPSS versión 27. Para determinar asociaciones entre variables categóricas, se
aplicó la prueba estadística de correlación Rho de Spearman. Los resultados se
presentan en tablas estadísticas para facilitar su interpretación y análisis.
En la Tabla 1, La presión sistólica
se distribuye de la siguiente manera: el 57% de los casos presenta un nivel
leve, el 32% un nivel moderado y el 11% un nivel severo. En cuanto a la presión
diastólica, el 52% muestra un nivel leve, el 44% un nivel moderado y el 4% un
nivel severo.
Tabla 1
Frecuencia
de los niveles de hipertensión arterial
Escala de niveles |
|||||||
Presión arterial |
Leve (S) 120 – 139 (D) 80 -89 |
Moderado (S) 140 – 159 (D) 90 -99 |
Severo (S) > 160 (D) >
100 |
|
Total |
||
|
F |
% |
F |
% |
f |
% |
|
Sistólica (S) |
57 |
57 |
32 |
32 |
11 |
11 |
100 |
Diastólica (D) |
52 |
52 |
44 |
44 |
4 |
4 |
100 |
En
la Tabla 2, se observó que el 61% tienen colesterol alto y el
39% muy alto. Con respecto al HDL el 46% tiene nivel alto y el 54% muy alto. El
LDL presenta el 90% nivel alto y el 10% en nivel muy alto. Los triglicéridos presentan el 79%
nivel alto y el 21% muy
alto.
Tabla 2
Dislipidemias en pacientes con
hipertensión arterial
|
|
Categorías |
|||
|
Alto (A) |
|
Muy alto (MA) |
|
|
Dislipidemias |
f |
% |
f |
% |
TOTAL |
Colesterol (A) 200 − 239 (MA) >240 |
61 |
61 |
39 |
39 |
100 |
HDL (A) 40-60 (MA) > 60 |
46 |
46 |
54 |
54 |
100 |
LDL (A)
160-189 (MA) >190 |
90 |
90 |
10 |
10 |
100 |
Triglicéridos (A) 200
– 499 (MA) >500 |
79 |
79 |
21 |
21 |
100 |
La
tabla 3, se visualiza la relación
entre el colesterol y la hipertensión arterial de los pacientes atendidos en el Centro de Salud Ambato Tamborapa. La relación es positiva, siendo un valor Rho de spearman
r=0,165 con una significancia de valor p = 0,101 ≥ 0,05. De acuerdo a la tabla Rho, la
correlación se ubica en un nivel “ positiva”.
Tabla 3
Relación
entre los niveles de colesterol y la hipertensión arterial
|
|
Correlaciones |
|
|
|
|
|
Colesterol |
Hipertensión arterial |
Rho de Spearman |
Colesterol |
Coeficiente de correlación |
1,000 |
,165 |
|
|
Sig. (bilateral) |
. |
,101 |
|
|
N |
100 |
100 |
|
Hipertensión arterial |
Coeficiente de correlación |
,165 |
1,000 |
|
|
Sig. (bilateral) |
,101 |
|
|
|
N |
100 |
100 |
En la tabla 4, se
observó la relación entre los triglicéridos y la hipertensión arterial de los pacientes atendidos en el Centro de Salud
Ambato Tamborapa. La relación es positiva, siendo un valor de Rho de spearman r=0,110 con una significancia de p = 0,274 ≥ 0,05.
De acuerdo a la tabla Rho, la correlación
se ubica en un nivel
“positiva”.
Tabla 4
Relación
entre los niveles de triglicéridos y la hipertensión arterial
|
|
Correlaciones |
|
|
|
|
|
Triglicéridos |
Hipertensión arterial |
Rho de Spearman |
Triglicéridos |
Coeficiente de correlación |
1,000 |
,110 |
|
Sig. (bilateral) |
|
,274 |
|
|
|
N |
100 |
100 |
|
Hipertensión arterial |
Coeficiente de correlación |
,110 |
1,000 |
|
Sig. (bilateral) |
,274 |
|
|
|
|
N |
100 |
100 |
Según
la Tabla 5, se observó la relación
del HDL y la hipertensión arterial de los pacientes atendidos en el Centro de Salud Ambato
Tamborapa. Siendo la relación de Rho de Spearman de valor r=0,214
y su significancia de valor
p = 0,033 ≤ 0,05 (asumido). Es así que al realizar
la interpretación Rho se determinó
que la correlación es “ positiva”; por tanto, existe
indicios que ambos indicadores están relacionados.
Tabla 5
Relación
entre los niveles de HDL y la hipertensión arterial
|
|
Correlaciones |
|
|
|
|
|
HDL |
Hipertensión
arterial |
Rho de Spearman |
HDL |
Coeficiente
de correlación |
1,000 |
,214* |
|
Sig.
(bilateral) |
. |
,033 |
|
|
|
N |
100 |
100 |
|
Hipertensión
arterial |
Coeficiente
de correlación |
,214* |
1,000 |
|
Sig.
(bilateral) |
,033 |
. |
|
|
|
N |
100 |
100 |
*La correlación es significativa en el nivel 0,05 (bilateral).
En
la Tabla 6, se observó la relación
del LDL y la hipertensión arterial de los pacientes atendidos en el Centro de Salud Ambato
Tamborapa. Siendo la relación de Rho de Spearman de valor r=0,221 con su significancia de
valor p = 0,027 ≤ 0,05 (asumido). Es
así que al realizar la interpretación Rho se determinó que la correlación es “ positiva”; por tanto, existe
indicios que ambos indicadores están relacionados.
Tabla 6
Relación entre los niveles de
lipoproteína de baja densidad (LDL) y la hipertensión arterial
|
|
Correlaciones |
|
|
|
|
|
LDL |
Hipertensión
arterial |
Rho de Spearman |
LDL |
Coeficiente
de correlación |
1,000 |
,221* |
|
|
Sig.
(bilateral) |
. |
,027 |
|
|
N |
100 |
100 |
|
Hipertensión
arterial |
Coeficiente
de correlación |
,221* |
1,000 |
|
Sig.
(bilateral) |
,027 |
. |
|
|
|
N |
100 |
100 |
*La correlación es significativa en el nivel 0,05 (bilateral).
Los
resultados obtenidos en esta investigación revelaron que, en cuanto a la
presión arterial, el 57% de los participantes
presentaron niveles leves de presión sistólica, mientras que el 32% mostraron
niveles moderados y el 11% niveles severos. Respecto a la presión arterial
diastólica, el 52% indicó un nivel leve, el 44% un nivel moderado y el 4% un
nivel severo. Estos hallazgos guardan similitud con los de Castro (2021), quien
encontró que el 56,20% de los pacientes presentaban hipertensión leve, el
22,62% moderada y el 21,16% severa. Además, concuerdan con el estudio de Núñez
(2017), donde el 60% de los pacientes presentaban hipertensión alta. No
obstante, estudios como el de Cotrina y Heredia (2023) reportaron porcentajes
notablemente menores, como el 3% de hipertensión moderada. Por otro lado, León
et al. (2020) identificaron que el 18% de las personas padecían hipertensión
arterial alta, mientras que Quishpe y Champutiz
(2022) y Avalos (2018) reportaron cifras del 23,9% y 27% respectivamente. Por
último, Oblitas y Alvarado (2023) determinaron que el 34,5% de los
participantes presentaban hipertensión arterial.
Estos datos sugieren variaciones en la prevalencia
de hipertensión arterial entre diferentes estudios, posiblemente debido a
diferencias en la metodología, el tamaño de la muestra, o las características demográficas
de las poblaciones estudiadas.
En
relación a las dislipidemias, se encontró que el 61% de los participantes
presentaron valores altos de colesterol total, y el 39% valores muy altos.
Respecto al HDL, el 46% tenía niveles altos y el 54% niveles muy altos,
mientras que en el caso del LDL, el 90% presentó niveles altos y el 10% niveles
muy altos. En cuanto a los triglicéridos, el 79% mostró niveles altos y el 21%
niveles muy altos. Estos resultados son consistentes con los hallazgos de León
(2020), donde el 36,66% presentaba hipercolesterolemia y el 41,66% hipertrigliceridemia. Sin embargo, estudios como el de
Quishpe y Champutiz (2022) reportaron cifras
ligeramente diferentes, como el 46,5% con niveles muy altos de triglicéridos.
Además, Ruiz et al. (2020) identificaron que el 66% de los pacientes tenían
niveles lipídicos en el rango límite, mientras que Ontaneda y Montero (2018)
encontraron que la dislipidemia mixta fue el tipo más prevalente en el 68% de
los pacientes. Por último, Avalos (2018) evidenció que el 27% de los casos
fueron hipercolesterolemia, las dislipidemias mixtas se encontraron en un rango
de 16%, y la hipertrigliceridemia en un 14%.
La
hipertensión arterial y las dislipidemias son dos condiciones interrelacionadas
que comparten varios mecanismos fisiopatológicos comunes.
La hipertensión arterial es una condición multifactorial que involucra una
interacción compleja entre factores genéticos, ambientales y comportamentales (Thiriet, 2019). Bioquímicamente, la hipertensión puede ser
influenciada por el sistema renina-angiotensina-aldosterona (SRAA),
el sistema nervioso simpático, y la disfunción endotelial (Patel, Rauf, Khan, y Abu-Izneid, 2017).
Las
dislipidemias, caracterizadas por niveles anormales de lípidos
en la sangre, están estrechamente ligadas a la aterosclerosis, una condición en
la que las arterias se endurecen y estrechan debido a la acumulación de placas.
El LDL (lipoproteína de baja densidad) es particularmente aterogénico y puede
contribuir a la formación de estas placas. El HDL (lipoproteína de alta
densidad), por otro lado, tiene un efecto protector al promover la eliminación
de colesterol de las arterias
(Pereira-Rodríguez et al., 2015).
La correlación entre dislipidemias e hipertensión arterial puede explicarse
a través de varios mecanismos fisiológicos y bioquímicos. La disfunción
endotelial, común en ambos trastornos, es un factor clave. La acumulación de
LDL en las arterias puede inducir una respuesta inflamatoria que lleva a la
disfunción endotelial, reduciendo la producción de óxido nítrico, una molécula
crucial para la vasodilatación. Esto contribuye al aumento de la resistencia
vascular periférica y, por ende, a la hipertensión arterial (Gimbrone y
García-Cardeña, 2016).
El aumento del colesterol total y del LDL, así
como los niveles bajos de HDL, se asocian con una mayor rigidez arterial, lo
cual puede aumentar la presión arterial sistólica (Mackey et al., 2012).
Además, los triglicéridos elevados pueden promover la producción de moléculas
proinflamatorias que afectan la función vascular
(Pérez-Martínez et al., 2010).
En
nuestro estudio, se encontró una correlación positiva significativa entre el
colesterol y la hipertensión arterial, con un valor de r=0,165 (p=0,101).
Asimismo, se observó una correlación significativa entre el HDL y la
hipertensión arterial (r=0,214, p=0,033), y entre el LDL y la hipertensión
arterial (r=0,221, p=0,027). Estos hallazgos coinciden con los resultados de
Núñez (2017), Quishpe y Champutiz (2022), y Castro (2021), quienes también encontraron relaciones significativas
entre las dislipidemias y la hipertensión arterial.
Estos datos respaldan la hipótesis de que las dislipidemias pueden contribuir
al desarrollo y agravamiento de la hipertensión arterial, posiblemente a través
de los mecanismos antes mencionados. El manejo de ambos trastornos es crucial
para reducir el riesgo cardiovascular general, destacando la importancia de un
enfoque integral en la prevención y tratamiento de estos factores de riesgo.
En
conclusión, el nivel más frecuente de hipertensión arterial observado fue leve,
con un 57% en presión sistólica
y un 52% en presión diastólica. Además, se encontró una alta prevalencia de
dislipidemia en pacientes con hipertensión arterial, con un 90% de los casos
afectados. Específicamente, el 79% de los pacientes presentaron niveles elevados
de LDL, el 61% mostraron altos niveles de triglicéridos, el 46% tenían bajos
niveles de HDL, y un 61% presentó colesterol elevado.
Asimismo, se demostró
una relación positiva entre las dislipidemias y la hipertensión arterial. Los
análisis estadísticos indicaron una relación positiva y directa entre el
colesterol y los triglicéridos con la hipertensión arterial, con valores de
r=0,165 y r=0,110 respectivamente. Por otro lado, tanto el HDL como el LDL
mostraron una relación significativa con la hipertensión arterial, con un valor
de significancia p ≤ 0,05. En concreto, la relación entre el HDL y la
hipertensión arterial fue de r=0,214, mientras que para el LDL
esta relación fue de r=0,22.
Los resultados indican
una asociación significativa entre la hipertensión arterial y las
dislipidemias, subrayando la importancia de monitorear y controlar tanto la
presión arterial como los niveles de lípidos en pacientes hipertensos para
mejorar su salud cardiovascular.
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